Borgoña Chilena

¡Es tiempo de fresas! Me encantan las fresas. En macedonias, en helados, en bizcochos, en tartas frías... tengo varias recetas con ellas, todas deliciosas. Pero lo que no tenía, exceptuando un gazpacho que hice hace mil años, era una bebida con ellas.

Hasta hoy, en que las he descubierto en un trago absolutamente delicioso: la borgoña.

La borgoña es un cóctel típico de Chile. En origen es una bebida habitual para celebrar las fiestas patrias. Y la receta es sorprendentemente sencilla: vino tinto, fresas y azúcar. También se le agrega hielo,  pero yo de momento no necesito tanta frescura, y me lo he tomado como aperitivo. ¡Es delicioso!

Mi único consejo es utilizar un vino de calidad. Tenía una botella de Coto sin abrir, buscando el momento idóneo. Como nosotros no solemos tomar vino si no viene alguien a comer, pues llevaba un par de meses guardado. Pero, hoy le he encontrado sitio, formando parte de este trago, que ya os digo que es cautivador. 

Yo lo veo antes del postre. O como aperitivo, que también. Las fresas aportan un sabor delicioso al vino, y el conjunto recuerda bastante a la sangría, pero con más cuerpo. Además, hoy he visto en el mercado unas fresas maravillosas, con perfume intenso, y no he podido resistirme a probarlo. 

Con este sencillo cóctel participo en el reto de Elena, Alfabeto Salado, que este mes estaba dedicado a las fresas y al vino. Espero que os guste.

Tiempo: 5 min + un par de horas en la nevera.

Ingredientes (para 2 personas):

• 400 ml de vino tinto de calidad.
• 2 cucharadas soperas de azúcar.
• 150 gr de fresas limpias.

Preparación:

Troceamos las fresas en cuñas, las ponemos en un bol y las mezclamos con el azúcar. Vertemos el vino y mezclamos bien. Tapamos y llevamos a la nevera hasta el momento de servir.

Voilá.

¡A vuestra salud!