Y si encima no tiene apenas preparación, mejor que mejor. ¡Sólo usaremos la batidora!
Bueno, y un cazo al fuego para llevar la leche a ebullición. Y eso es todo. El postre listo sólo con una noche de reposo en la nevera. Definitivamente, me gusta este tipo de cocina, ¿a vosotros no?. Esta receta, la tenía guardada en pendientes desde el pasado verano, esperando su momento triunfal. Desde que la descubrí en este blog maravilloso, no veía el día en que la probara. Lo que me convenció del todo fueron las palabras "sin cocción" y "chocolate negro". Mi abracadabra particular.
Como bien dice su autora, este postre es rico y debe ser servido en raciones pequeñas. Yo me he tomado ciertas libertades, como sustituir la nata por leche evaporada, con la esperanza de reducir al menos un poco las calorías. Si vais a la fuente original, veréis que la autora no utiliza azúcar para endulzar el postre, ya que los ingredientes son lo suficientemente ricos y sabrosos. Yo he hecho lo mismo, y el resultado es brutal.
Me han salido cinco raciones de unos 120 ml. Para mi, suficiente. Un postre rico, cremoso y aromático, ideal como colofón para una comida festiva. Yo lo he aromatizado con un chorrito de buen coñac, pero podéis utilizar el licor que prefiráis, o incluso no poner si lo van a tomar niños. un Cointreau, un poco de licor de café o de wiskey, le quedarán igual de bien. (Por cierto, las cucharitas adorables las he comprado en Joom).
No podía dejar de mencionar que he utilizado unos huevos frescos de una granja que hay aquí en el pueblo. Nunca me cansaré de decir lo importante que es utilizar productos de temporada, de proximidad y sobre todo que estén lo más frescos posible. Por salud, por sabor y por economía, siempre estarán más baratas las coles del pueblo de al lado que un pimiento rojo, comprado en el súper fuera de temporada, y que seguramente no tenga sabor alguno.
¿Qué te parece? ¿lo probamos?
Tiempo: 5 min + 1 noche en la nevera.
Ingredientes (para 5 raciones):
- 200 ml de leche evaporada.
- 100 gr de chips de chocolate negro ( los míos tenían un 55 % de cacao).
- 2 huevos L.
- 1 cucharada de postre colmada de café instantáneo.
- 1 chorrito de vainilla.
- 1 chorrito de coñac.
Preparación:
En el vaso de la batidora, ponemos los huevos, los chips de chocolate y la vainilla y trituramos bien hasta que el chocolate se deshaga por completo y quede una crema uniforme. Reservamos.
Ponemos en un cazo la leche evaporada y el café y calentamos hasta que empiece a hervir. Apagamos el fuego y vertemos sobre la crema anterior, con el brazo de la batidora en marcha, para que se integre todo bien. No hay que demorarse en mezclar la leche con la crema de huevos una vez apagado el fuego, para que no pierda calor.
Cuando esté bien integrado añadimos el coñac o licor de nuestra elección (opcional). Volvemos a batir.
Vertemos en recipientes y dejamos entibiar. Tapamos y llevamos a la nevera hasta el día siguiente.
Servimos con un copete de nata (opcional, una galletita o media fresa hacen el mismo papel).
Delicioso.
Mabel.
Cierto Mabel, es casi light este postre... Así que no me queda más que guardarlo en mis pendientes y seguir engordando la lista (y mientras sea la lista y no mi trasero mejor que mejor ja ja ja)
ResponderEliminar¡Besos mil!
Por cierto, las cucharilla monísimas de la muerte
Es una autentica perdición de bueno,un abrazo
ResponderEliminarMil gracias!! Un abrazo!!!
EliminarLas cucharitas me han gustado tanto que iban 5 en el paquete y he pedido otro... esta vez en color plata vieja. El postre no es de dieta, pero si usamos un chocolate de calidad es bastante aceptable en cuanto a grasas... además las raciones las ponemos pequeñas y aquí paz y después gloria.
ResponderEliminarA mis sobrinos adolescentes les ha encantado, eso es garantía de éxito!!!
Mil besos resalá!!!