Me encantan los gofres. Desde que tengo mi gofrera en forma de flor, aunque no los hago tan a menudo como me gustaría, mis meriendas (cuando dispongo de tiempo, claro), han dado un giro radical. Buena fe de ello dan estos gofres.
La avena es un ingrediente importante en mi alimentación. Suelo tomarla en el desayuno, excepto los fines de semana que me doy un homenaje y tomo algo de bollería, pero es que también me gusta utilizarla en repostería. Ya os mostré mis gofres de avena, y hoy os traigo otra versión, que si bien pudiera parecer similar, no se parecen en absoluto.
Plátanos, plátanos, plátanos... soy adicta. También los utilizo muchísimo, y claro, de vez en cuando alguno se queda rezagado (y blandurrio), en el fondo de la nevera. Pues bien, tenía en pendientes esta receta, y no pude resistirme.
Ya os contaba cómo preparar la leche de avena hace unos días, y que la pulpa sobrante la guardásemos, ¿verdad?, pues esta receta es una muy buena solución. El resultado son unos gofres tiernos, jugosos y muy, muy ricos.
La receta original da para cuatro raciones, yo la he reducido a dos: con estas cantidades os saldrán cuatro gofres, dependiendo del molde que utilicéis. Pero lo que es seguro, es que serán saludables, fáciles y sobre todo, deliciosos. ¡Ah! Y los podéis hacer sin la pulpa de avena, faltaría más.
Tiempo: 30 min.
Ingredientes (para 4 gofres):
- 1 taza de harina de avena.
- 1 huevo M.
- 1 plátano muy maduro.
- 1 taza de leche de avena (también puedes usar de vaca, desnatada).
- 1 cucharada sopera de azúcar moreno.
- la pulpa resultante de preparar la leche de avena.
- 1 cucharada de postre de aceite de oliva virgen extra.
- 1/2 cucharadita de café de levadura.
- 1 pizca de sal.
- 1 pellizco de canela.
- 1 pellizco de nuez moscada.
- aceite para engrasar la gofrera (yo uso spray desmoldante).
Preparación:
En un bol, mezclamos todos los ingredientes secos.
En otro bol, batimos el huevo con la leche, añadimos el plátano machacado (a mi me gusta que queden trocitos de pulpa entera), el aceite y la pulpa. Mezclamos muy bien.
Añadimos los ingredientes secos a los húmedos, la masa quedará densa.
Ponemos a calentar la gofrera, engrasando las placas. Una vez caliente, ponemos 2 ó 3 cucharadas de masa en la placa y dejamos 2 minutos. Tiene que quedar dorado por los bordes, en caso contrario dejamos 1 minuto más.
Así hasta acabar con la masa.
Servimos decorado con sirope de chocolate, chocolate rallado y rodajas de plátano.
¡Se me olvidaba! Congelan genial.
Mabel.
Adoro los plátanos. Y la avena. Y me encanta la idea de un gofre libre de grasas, lácteos y azúcares de más.
ResponderEliminarHola Mabel.
ResponderEliminarYo también uso mucho la avena, pero la leche no la he preparado. No vine a ver la tuya y si me pongo, ya lo haré.
Haces bien en darte gusto y usar mucho tu gofrera tan bonita y que tan buen resultado te da.
No sé si sabes, que lo que queda al preparar leches vegetales, lo llaman "okara", nombre en japonés.
Yo cuando publiqué la leche de almendras, recuerdo que usé el okara de almendra en hacer un pan. Jo, pasa el tiempo y tenemos recetas, que ya no repetimos.
Me llevo la idea de lo rico que tiene que estar tu gofre.
Besets.