Pastel de Chocolate a la Taza (sin gluten y sin lácteos).

 Hay ocasiones en que nos merecemos una pausa. Y si va acompañada de chocolate, tanto mejor, ¿no creéis?

Y eso mismo es lo que os propongo hoy: una taza de café con un bocado dulce y chocolatoso. Venga, no seáis tímidos que invito yo.


Me remontaré al principio. Cuando era jovencita, me coleccionaba todas las recetas que venían impresas en los envases de productos que se solían utilizar en casa. Así, me encontré con una buena selección de pijamas, postres hipercalóricos a base de leche condensada, pseudocroquetas hechas con sopas de sobre, buñuelos varios con Maicena, y otros condumios por el estilo. Definitivamente, estos fueron mis primeros coqueteos con la cocina. Aunque no siempre los cocinase, me gustaba atesorarlos encuadernados cuidadosamente.

De aquellas recetas poco o nada sé, ya que la mayoría se perdieron por el camino. Pero lo que sí me ha quedado es la curiosidad por ver si en los sobres de la levadura (por poner un ejemplo), aparece alguna sugerencia para emplearlos. Y eso es lo que me ha pasado con este pastel. La receta venía impresa en uno de los sobres de levadura del Mercadona, y me pedía a gritos que la preparase.

Lo de chocolate a la taza ya es sugestivo de por sí, y lo único que he tenido que hacer es adaptarla  a mi gusto, y ya de paso, hacerla apta para intolerantes al gluten. El resultado ha sido tan satisfactorio, que se merecía ser compartido. Y eso que no lo podéis oler... ¡porque es realmente  seductor! Se merecía  vestirla de gala, y lo he solventado con unas grosellitas que ya de paso están bien ricas.

Sólo hemos de tener cuidado al comprobar que todos los ingredientes son sin gluten. Por eso os indico las marcas que yo he usado, ya que algunos como el aceite de oliva virgen extra y las harinas de arroz y sarraceno son naturalmente aptos, pero con el resto igual no es tan fácil. Lo dicho, tenéis que probarlo porque queda con una textura fantástica. Incluso aunque no seáis intolerantes, como es mi caso.

¿Nos ponemos?

PD: mis medidas son un poco caóticas, aún no me he acostumbrado a pesar todos los ingredientes secos, espero que no me lo tengáis en cuenta ;).

Para un molde de 25x11 cm. aprox.

Ingredientes:

• 100 ml de aceite de oliva virgen extra.
• 100 ml de leche de soja ecológica Consum.
• 150 ml de azúcar moreno integral o panela.
• 2 huevos L.
• 100 gr de harina de trigo sarraceno.
• 40 gr de harina de arroz.
• 150 gr de chocolate en polvo para taza Valor.
• 2 cucharaditas de las de café de levadura química Hacendado.
• 1 cucharadita de las de café de bicarbonato.
• 1 pellizco de sal.
• margarina para engrasar el molde.

Preparación:

Encendemos el horno a 170º.

En un bol, batimos los huevos con el azúcar. Añadimos el aove y la leche de soja y mezclamos muy bien. Reservamos.

Pasamos por un colador (tamizar) las harinas y el cacao en polvo junto a la levadura, el bicarbonato y la sal. Añadimos esta mezcla a la anterior y, con ayuda de unas varillas metálicas, la vamos integrando sin sobrebatir. Sólo nos aseguraremos de que queda todo bien mezclado. Un truco es utilizar un bol de cristal transparente.

Engrasamos el molde con la margarina y espolvoreamos ligeramente con harina de arroz. Vertemos la mezcla, damos unos golpes en la base para eliminar cualquier burbuja de aire que se haya podido formar y llevamos al horno.

A los 45 min comprobamos si está cocido pinchando con una brocheta en el centro, que ha de salir limpia. De no ser así, dejamos 5 minutos más.

Sacamos y, una vez templado, desmoldamos dando unos golpes en la base y volcando sobre una rejilla.

Servimos espolvoreado con azúcar glas, cacao en polvo o lo que se nos antoje. 

Os recomiendo degustar en el día o al día siguiente. Si no lo vamos a acabar antes, recomiendo cortar en rebanadas y congelarlo. Después sólo hay que sacarlo y dar un golpe de tostadora. ¡delicioso!

Mabel.