Falso Pastel Frío de Marisco (microondas).

Sí, habéis leído bien: falso pastel frío de marisco. Porque es más falso que una moneda con dos caras.

Pero rico está un rato, y más sencillo imposible. Además haremos limpieza de restos con él, que a estas alturas ya sabéis que aquí no se tira nada.

¿Qué pasa si resulta que te sobran unos trozos de sepia al ajillo, que nadie ha querido rematar, y también un puñado de mejillones al vapor? Pues nada, tú te los guardas en un tupper y luego te pasas por aquí para ver qué hacemos con ello, que siempre siempre habrá solución. Ya os digo que, si no veis aquí algo que os guste, podéis escribirme y preguntarme, que seguro que encontramos solución.

Pues como os decía al principio, se me habían juntado esos restos de sepia y de mejillones, pero es que además, vaciando el congelador, habían unas barritas de surimi aburridísimas, ya que en verano caen con rapidez, pero ahora en invierno nadie se acuerda de ellas. Y recordé haber visto algo parecido en Directo al Paladar (que siempre en buena fuente de inspiración) para dar salida a esos tristes abandonados.

El resultado es más que satisfactorio, queda un pastel salado delicioso que lo mismo nos sirve como entrante o cena ligera que como relleno para canapés, porque ni os cuento lo rico que está en rebanaditas sobre unas tostadas. Y, claro, como es un pastel frío necesita una noche de reposo en la nevera. De hecho, su mejor sabor y consistencia lo tendrá cuando lleve dos días hecho.

Seguimos dando ideas para utilizar el microondas, sin ensuciar y rápidamente.

Tiempo: 15 min. + una noche en la nevera.

Ingredientes (4 raciones):

1/2 taza (120 ml) de restos de pescado, yo he usado sepia al ajillo y mejillones en su jugo.
6 barritas de surimi, descongeladas.
1/2 tomate pequeño, si no tienes puedes poner un par de cucharadas de tomate frito.
3 huevos M.
200 ml de nata para cocinar (18% mg).
1 chorito de salsa de soja (yo he usado Kikkoman).

Preparación:

Ponemos todos los ingredientes en un bol capaz. Metemos el brazo de la batidora y trituramos hasta que quede fino, sin tropezones. Rectificamos de sal, aunque con la salsa de soja a mi no me hizo falta poner nada.

Vertemos en un molde de corona que pueda ir al microondas, previamente engrasado (yo he usado spray del que uso para engrasar los bundts), y tapamos con un film pinchando en varios puntos con un cuchillo para que escape el vapor.

Cocemos a potencia máxima 7 minutos y medio (es lo que yo lo tuve), si pasado este tiempo pinchamos con una brocheta en el centro y sale húmeda, dejamos un minuto más, y así hasta que la brocheta salga limpia.

Dejamos enfriar a temperatura ambiente, y una vez frío lo llevamos a la nevera. Lo desmoldamos en el momento de servir.

Está delicioso, con mayonesa como yo he hecho o con tomate frito.

Antes de tirar algo, míralo con otros ojos, casi todo tiene reciclaje excepto los huesos.

Mabel.