Los días de verano se han acabado. Aunque oficialmente quede aún una semana, ya se siente el otoño. Hasta la temperatura ha dado un bajón brusco. El regreso a la cotidianidad ha hecho que nos cambie hasta el humor. Y, por supuesto, estamos a ver si conseguimos quitarnos ese flotador que hemos criado alrededor de nuestra (sí, un día la hubo) cintura.
Que si las cervecitas a media tarde (vamos, a cualquier hora, que te he visto), que si las tapitas para acompañar a las cervecitas; que si el heladito a media mañana; que si la cenorra del sábado noche con los amigos... vamos, que hemos acumulado reservas suficientes para soportar una semana incomunicados por una nevada, si es que vivimos en zonas que se prestaran a ello. Bueno, igual exagero un poco, pero vamos, que nos sobra algún kilito.
En éstas que estoy yo difundiendo las bondades de comer cremas de verdura, ya que son saciantes y nos aportan un montón de fibra y minerales. Y en éstas que acabo de ver las primeras remolachas por el mercado, y me he acordado de esta sopa de color tan llamativo. Y la he hecho. Y qué rica está.
Como aún las temperaturas son agradables, apetece tomar cosas frías. Esta versión de la sopa borsch, se tritura a modo de puré, y se cocina con azúcar. Luego, una vez fría, se aliña con zumo de limón. Y, aunque tengo que confesar que yo tenía mis reticencias sobre si aquello estaría comible, tengo que admitir que no sólo es comible, sino que está delicioso.
La sopa borsch, en su versión fría, es consumida en Lituania, Rusia y Ucrania, siendo originaria al parecer de éste último país. Es muy popular entre la cultura judía, donde es de consumo masivo. No es igual que su versión en caliente, la sopa tiene la particularidad de lucir un color rojo carmesí cuando está cocinándose, y cuando se enfría se torna de un precioso color fucsia. Tampoco los ingredientes son los mismos, ni la forma de cocinarse. Ya haremos la versión caliente en otra ocasión.
Las remolachas son unas raíces llenas de propiedades. Tras una etapa caídas en el olvido, ya que se utilizaban básicamente para elaborar azúcar y alcohol, volvieron a consumirse como alimento. Son ricas en antioxidantes y en fibra, y últimamente se ha comprobado que son ricas en flavonoides, y por tanto un potente anticancerígeno.
Tradicionalmente se sirve con crema agria, pero yo he utilizado queso batido 0%, y no le puede ir mejor a la crema. Yo he cogido la receta de aquí, variando un poquito algún ingrediente. ¡Vamos a empezar a cuidarnos de manera sabrosa y fácil!
Tiempo: 40 min.
Ingredientes (4 raciones):
-3 raíces de remolacha.
-1 patata pequeña.
-1 cebolla mediana.
-500 ml de caldo de pollo.
-aceite de oliva virgen extra.
-1 cucharada sopera de azúcar moreno.
-el zumo de 1 limón.
-queso batido 0%, al gusto.
En una cacerola, sofreímos la cebolla picada a fuego lento, con un chorrito de aceite. Añadimos el azúcar moreno, y dejamos sofreír unos cinco minutos. La cebolla ha de quedar translúcida y un poco caramelizada.
Añadimos la patata pelada y cortada menuda, damos unas vueltas. Añadimos las remolachas, peladas y troceadas, y cubrimos con el caldo. Dejamos cocer unos 30 min, tapado y a fuego bajo.
Trituramos a conciencia con la batidora, añadimos el zumo de limón y llevamos a enfriar a la nevera.
Degustamos la crema bien fría, con un chorretón de queso batido y un hilo de aceite.
¡Deliciosa! Y con un color increíble...¡ y pensar que no me gustaban las remolachas!
Sed felices.
Hola Mabel, ya estoy aqui tu llegas de vacaciones y yo me marcho jiji, y aunque publico igual, hasta octubre no estaré a tope con todo.
ResponderEliminarEmpiezo, el blog me encanta Te ha quedado precioso muy claro y con mucha luz, las fotos preciosas, si es que nos ha dado a todas por cambiar el diseño del blog, bueno el mio era algo urgente, estaba fatal.
Y mira me encanta la remolacha en crudo, y me encantan las cremas todas, pero nunca la hice de remolacha, sin duda la probare, se ve espectacular.
Besinos
El toque de Belén
Pruébala, te va a conquistar seguro!! Además quiero publjcarbla versión caliente, que es algo distinta, ya que en nada no apetecerá tomar frío nada que no sea cerveza, jajaja
EliminarUn beso y muchas gracias por visitarme!!!