Si además utilizas un pan de calidad, de un obrador de confianza, y lo tuestas ligeramente, ya lo bordamos. Hoy, os animo a preparar un tentempié maravilloso sin salirnos de la línea de comer sano que nos hemos propuesto al comenzar el año.
Esta receta de paté circula desde hace mil por los foros de fitness y no hay aficionado que no la conozca. El atún siempre es al natural, claro está. Y al natural me refiero que no vale el atún en aceite, que añade grasas que no nos hacen falta alguna, sino al que viene en conserva "al natural", como bien indicará el envase. Y me diréis: ¡pero si ese atún está reseco y no sabe a nada! Y sí, algo de razón tenéis, pero desde que era jovencita me habitué a tomarlo así (por aquello de cuidar la línea, y en aquella época también hacía deporte), y cuando lo tomo en aceite lo encuentro grasiento. Mira, todo es acostumbrarse.
Lo del aguacate es imprescindible. Sí, porque es lo que proporciona textura a esta crema y aporta grasas sanas y mucha cremosidad, además de todos los beneficios y vitaminas que tiene esta fruta (a la que por cierto adoro). Ya sé que están por las nubes, pero tampoco hace falta tomarlo a diario, y en mi defensa diré que el resto de los ingredientes de mis tostas son totalmente sencillos y asequibles. Yo le he añadido a la receta básica (prácticamente es atún y aguacate, sin más), un trocito de cebolleta tierna y un chorro de limón, y oh magia que cosa tan rica.
Poco a poco vamos recuperando fuerzas, y las ansiadas vacaciones están ahí, casi en la punta de mis dedos. Ahora que tendré mucho más tiempo, iremos a comprar verdura al mercado (¡un lujo en época de trabajo para mi!), estaré pendiente del calendario de las frutas, verduras y pescados, y mi cocina se llenará de color y aromas. Me encanta cocinar de forma consciente, con tiempo y sin prisas. Y ese momento ha llegado al fin.
Hoy de momento, os invito a estas deliciosas y sencillas tostas, un lujo asequible para cualquiera.
Tiempo: 10 min.
Ingredientes (para 2 personas):
- 2 latitas de atún al natural.
- 1 aguacate mediano, en su punto.
- 1 cebolla tierna pequeña.
- 1 limón.
- 1 zanahoria pequeña.
- un puñadito de rúcula.
- 4 rebanadas gruesas de buen pan.
- sal negra, o cualquier otra.
- un hilo finísimo de aove (puedes omitirlo, pero le dará sabor)
Preparación:
Ponemos en el robot (o en el vaso de la batidora en su defecto, pero el robot deja una textura más aireada y esponjosa), el aguacate, del cual reservaremos unas lonchitas para montar las tostas; el atún bien escurrido de su agua; la cebolleta, de la cual también reservaremos unas lonchitas y un chorro de zumo de limón. Trituramos al gusto, a mi me gusta que quede algo granuloso pero como prefiráis.
Tostamos el pan. Con una lengua de silicona, repartimos el paté en las tostadas, dejando una capa algo gordita. Coronamos con las lascas de cebolleta, zanahoria rallada o bien cortada con el Spiralizer (¡qué aparato tan maravilloso, estoy enganchada!), la rúcula y por fin las lonchitas de aguacate. Si no tenemos problema de peso un hilo de aove le irá genial. Terminamos espolvoreando un poco de sal negra, sal Kosher, o simplemente sal común. Listo.
A disfrutar. Este paté es preferible tomarlo recién hecho, pero si sobrara se puede guardar poniendo el hueso del aguacate dentro del paté para evitar que se oxide.
¿Me cuentas cómo tomas las tostas en casa? Seré toda oídos.
Mabel.
Unas tostas coloridas y sabrosisimas.
ResponderEliminarmil gracias, lolines. Están muy ricas.
EliminarSencillamente DELICIOSA, besos
ResponderEliminarsi que lo está. Mil gracias, Marijose. Besos!!!
EliminarRiquísimas, me encanta lo que lleva :) Incluso para desayunar me las tomaba!
ResponderEliminarBesos.