Tarta de fresa y almendra. Receta sin gluten.

...¿Y en qué hemos utilizado ese estupendo curd de fresas del otro día?

Pues en una tartita deliciosa, sencilla y con esfuerzo mínimo.


La verdad es que lo que llevaba en la cabeza era una tartaleta, con base de masa quebrada casera, rellena de crema y cubierta de fresas. Pero me he acordado de que hace tiempo que no os doy una versión apta para celíacos, sencilla y con mucha fruta. Y lo demás es historia.

Las prisas me jugaron una mala pasada. Lo correcto hubiera sido napar la base con el curd y dejar reposar en la nevera antes de añadir un poco más de curd para que quedase bien napada.  Y a su vez, dejar enfriar esta segunda capa unas horas antes de añadir la fruta fresca. Yo no lo hice, pequé de impaciente, y las fresas bailaban encima de la base aún demasiado blanda. Pero ese error ya no lo cometeréis vosotros, porque ya os he avisado yo.

La receta de la base la encontré aquí, a la que hice algunos cambios. El resto, el curd de la anterior receta (aquí), y un puñado de buenas fresas bien rojas. Ah, y un almíbar que es una golosina, de lima limón y que me ha conquistado al 100%. Seguro que repetiré cuando tenga que pincelar frutas rojas, porque les va de maravilla.

No tengo mucho más que añadir, salvo que es una delicia de postre, que al día siguiente es la repera (cosa que aconsejo encarecidamente, el reposo de un día en la nevera antes de consumir), y que os van a hacer la ola. A mi me la han hecho, celíacos y los que no lo son.

Ya sabéis, es super sencilla, la única dificultad es respetar los tiempos de reposo.

Tiempo: 30 min la base, un par de horas de enfriado, una tarde para reposar la cubierta y toda la                         noche de reposo en la nevera la tarta una vez montada.

Ingredientes (para 6-8 raciones):

• la mitad de la receta del curd de fresas.
• un buen puñado de fresones bien rojos.
• 200 gr de almendra molida.
• 3 huevos.
• 125 ml de azúcar blanco (un envase de yogur).
• 40 gr de mantequilla a temperatura ambiente
• ralladura de medio limón.

para el almíbar:

• el zumo de 1/2 limón.
• el zumo de 1 lima.
• 3 cucharadas soperas rasas de azúcar blanco.

Preparación:

Encendemos el horno a 175º.

En un bol, batimos con las varillas los huevos con el azúcar y la mantequilla, que estará blanda pero no derretida. Cuando esté todo bien integrado, añadimos poco a poco la almendra hasta que esté bien mezclado todo y no queden grumos.

Vertemos en un molde engrasado de unos 22 cm. Horneamos unos 30 minutos, o hasta que el centro esté cuajado. Sacamos del horno y dejamos enfriar por completo.

Mientras se hace la base, preparamos el almíbar: mezclamos todo en un bol de cristal y llevamos al microondas a potencia máxima, un minuto. Sacamos y removemos, ponemos medio minuto más. Repetimos hasta que el almíbar alcance el punto, que es cuando la cuchara que usemos quede cubierta de una fina capa sin escurrirse fácilmente. Dejamos reposar.

Cubrimos bien la base con el curd de fresas. Metemos en la nevera unas dos horas para que asiente.

Volvemos a cubrir con más curd, ya a nuestro gusto. La idea es que quede una capa como de 1/2 cm encima de la base. Volvemos a llevar  a la nevera, esta vez unas cuatro o cinco horas.

Cubrimos la tartita de fresas troceadas, en rodajas o como más nos guste. La pincelamos toda con el almíbar. Cubrimos con cuidado y dejamos reposar una noche en la nevera.

¡Es deliciosa! Si la hacéis no dudéis en contármelo...

Mabel.