Hoy habréis leído el título de la entrada, y algun@s de vosotr@s habréis pensado ¿jarrr? ¿De repente cocina japonesa? Pues sí, hoy toca japanese recipe.
Esta receta me evoca a mi más tierna infancia. Recuerdo que vi el nombre el plato en una revista en la sección "donde comer en Madrid", ya que parecía ser que en un restaurante oriental (no recuerdo el nombre), cocinaban el mejor yakitori de la capital.
En mi mente infantil imaginaba los comensales vestidos con kimonos, envueltos en una atmósfera mística y degustando estos platillos, que debían de saber muy raros, pero que sonaban tan bien: yakirori, tepanyaki, wasabi, sushi...
He ido a algún que otro restaurante de cocina japonesa, y no sólo me encanta la comida, sino que me gusta muchísimo su estética. Pero, ay, mi chico es muy muy tradicional, muy ibérico, y he tenido que desistir.
Pero eso no quita que me lo prepare para mí misma, ¿no?
El yakitori es, literalmente, un pincho de pollo con verdura. La receta original va adobada con la salsa teriyaki, que viene a ser una mezcla de mirin, salsa de soja, sake, azúcar y, ocasionalmente, jengibre. Pero yo tenía un aceite de oliva aromatizado con salsa de soja y jengibre y con él me he apañado. Un día de éstos preparo la salsa original, pero de momento con ésta el plato sale de 10.
Ingredientes (por persona):
-6 dados hermosos y regulares de pechuga de pollo.
-6 tomates cherry.
-7 dados de pimiento verde, de carne gruesa.
-aceite de oliva, salsa de soja, jengibre, una pizca de azúcar.
Ponemos los dados de pollo a marinar en la mezcla de la salsa, que prepararemos mezclando (a ojo), el aceite, un chorro de salsa de soja, jengibre (puede ser rallado o en polvo) y una cucharadita de azúcar. Lo tendremos de esta guisa al menos una hora.
Vamos insertando los ingredientes, alternados y empezando por el pimiento, en dos brochetas de madera.
Ponemos la plancha o, en su defecto, una sartén muy grande de fondo grueso, a fuego medio. Cuando esté caliente, hacemos las brochetas, girando continuamente, hasta que se doren (sin quemarse). Tardarán unos 10 minutos. Durante la cocción, vamos rociando con la salsa del marinado.
Listo. La carne queda sabrosa e increíblemente jugosa. Casi equivale a un viaje a Kioto...
¡Buen provecho!
umm que buenas tienen que estar estas brochetas, el nombre raro pero como los japoneses jajajajaja. besoteeeeeeee
ResponderEliminarPero raros de narices, jajaja y que ricos sus platos! Un beso, Miriam!
EliminarTienen muy buena pinta. No soy demasiado experta en comida japonesam aparte del sushi y poca cosa más.
ResponderEliminarBesos.
Ni yo... pero algo sí sé de la cocina nipona ¡les encanta el wasabi que pica como un demonio! Si la receta no lleva, está todo muy rico...
EliminarBesos, Ana!!!
Hola Mabel. Te devuelvo la visita, me quedo de seguidora y a pesar de ser vegetariana, estas brochetas se ven deliciosas para el resto de la famili que no lo son.
ResponderEliminarUn besote.
Me encanta Mabel, ya habrás visto que yo soy muy fan de la comida oriental, y la soja me vuelve loca.
ResponderEliminarEsta noche cae!
besos!
Vaya que sí, tienes que probarlo porque te va a encantar! Besotes!
EliminarQue ricooooo!!! me has abierto el apetito!! de seguro lo hare porque se ve riquisimo!!
ResponderEliminarmuchos besitos
http://flashlovee.blogspot.com/
¡Y por qué no!
ResponderEliminarEs genial experimentar con recetas de diferentes partes del mundo. Te han quedado super apetecibles, y con ese aceitito aromatizado han de ser lo más.