Y sencillo a más no poder. Estamos en plena temporada de paraguayos y hay que aprovechar. Esta fragante fruta se presta tanto a tomar en crudo como cocinada. Si bien es cierto que su forma achatada resulta algo antipática para pelar, su jugoso y delicioso interior bien merece la pena el esfuerzo.
La idea de hoy es utilizarla para una salsa riquísima con la que vamos a acompañar unos filetes de pechuga de pollo rebozados. Aunque podéis utilizarla con pescado o carnes rojas... ¡con lo que prefiráis!
Los paraguayos o paraguayas (también llamados chatos) son una mutación del melocotón. Presentan una forma aplanada que los distingue. Están disponibles de mayo a septiembre, según zonas. Son ricos en vitamina B y carotenos, son antioxidantes y sólo aportan 45 calorías por 100 gr. ¿Y os he dicho que están deliciosos? Ya los preparé en una estupenda galette, receta aquí.
Pero esta vez vamos a consumirlos en un plato salado. La salsa la podemos dejar preparada con antelación y en el último momento darle un calentón y acompañar así a nuestros filetes empanados. Os aseguro que os van a encantar servidos de esta guisa.
Tiempo: 30 min.
Ingredientes (4 personas):
-3 paraguayos de buen tamaño.
-1 cebolla mediana.
-un chorrito de coñac.
-un chorrito de AOVE.
-nuez moscada.
-tomillo y sal.
-2-3 filetes de pechuga de pollo por persona, según tamaño.
-1 huevo.
-harina para rebozar (de trigo, maíz, arroz).
Preparación:
Para pelar los paraguayos, los podemos escaldar un minuto en agua hirviendo. Así saldrá la piel sin esfuerzo alguno.
Ponemos en una cacerola baja la cebolla picadita pequeña con un chorrito de aove. Cuando empiece a transparentar, añadimos la pulpa de los paraguayos en trozos. Dejamos un par de minutos que sofría a fuego medio, sin que coja color. Aliñamos con una pizca de nuez moscada y tomillo.
Perfumamos con el coñac y dejamos un minuto más. Regamos con un vasito de agua y dejamos cocer, tapado, 20 min. Los últimos cinco minutos destapamos la olla y si queremos, deshacemos la fruta con una cuchara de madera al tiempo que termina de evaporar el líquido.
Mientras, pasamos los filetes por huevo y harina y freímos en aove hasta que se doren.
Servimos con un cucharón de salsa.
¡Una idea fabulosa para la cena! Espero que os haya gustado.
Mabel.
Se me hace la boca agua al pensar en esa salsa, qué rica XD
ResponderEliminarGracias guapa!!!
EliminarBss
No me ha gustado nada Mabel... Me ha encantado, soy una forofa de los platos salados con salsas de fruta, y mira tu, el paraguayo no lo tenía fichado y me encanta, así que probaré.
ResponderEliminarBesiños para ti y el costillo y buen finde
Es que estoy en plena temporada y hay que promocionarlos... Jajajja
EliminarBesotes para vosotros dos también!!!!