Buenos días amores.
¡Bienvenidas una semana más a mis crónicas bodiles!
Seamos realistas.
Yo con lo que soñaba era con aparecer el día B montada en un flamante Rolls Royce, vintage a ser posible, por supuesto de color blanco y decorado con cintas y flores. Peeero... el alquiler por un día (sí chicas, reconozco que lo indagué, jajaja), suponía (casi) la mitad del presupuesto del banquete. Vamos, como que no.
Así que, como se trata de una ceremonia en familia, en el pueblo y con un ambiente muy campestre, ésto es lo que me gustaría de verdad tener ese día si algún amigo desprendido (y feliz propietario de alguna de estas preciosidades), se ofreciera a prestarme:
¿No sería bonito un coche así, azul celeste y lleno de globos? Ay... ¡me encanta!
Una opción muy yankee, pero si encontrara alguna camioneta así ni me lo pensaba... Además podría cargar algún polizón el la parte trasera. ¡Preciosos los pompones de colores!
Aquí tenemos la joya de la corona y algo nada difícil de encontrar en estas latitudes. Hasta el paisaje es muy de aquí. Pero eso sí, sin tantas flores que no veríamos ni torta, jajaja.
Y ahora, queridas, lo que probablemente sí tenga yo ese día:
Decorar mi propio coche para la ocasión. |
Desde luego, el transporte también es importante. Pero o es muy muy especial o me decantaré por lo más sencillo y fácil: mi coche. Algún adorno en las manecillas de las puertas y quizás me copie alguna de las dos primeras ideas: globos o pompones. Aunque unas latas tampoco me disgustarían...
¿Qué os ha parecido? ¿Demasiado quizás? jajaja...
Mil besos y gracias por estar aquí.
Hola preciosa, si no estuviéramos tan lejos te llevaba en mis 2CV, todavía es más bonito que el que nos muestras en la foto jijiji, en serio no estaría mal llevarte montadita en el, besossss
ResponderEliminarAy Carmen, que más quisiera yo!!! Estaría encantadisima montada en tu 2CV!!! Sería genial, verdad? Jeje de todas formas gracias infinitas por ofrecerte!!!
EliminarMil besos!!!!