¿Os habéis dado cuenta de lo que me gustan los cakes?
Por su forma, por lo bonitos que quedan en la mesa, por lo fácil que resulta cortarlos a rebanadas...
Ahora estoy pillando el gusto a la buttermilk. A mi cake le ha dado una jugosidad increíble... y las especias unos aromas que dicen "cómeme".
Y las peras... esas gran abandonadas en mi cocina. Y mira que nos gustan.
La receta la he sacado del blog Local Milk, donde he encontrado un cake de manzana que he tuneado a mi manera. El blog es increíble, no en vano ha ganado premios muy prestigiosos... y esas fotos casi siempre en penumbra, tienen su aquel. La verdad es que me tiene enganchada. Os invito a que os deis un paseo y lo descubráis. Y si lo conocéis, ¡veréis que lo que os digo es verdad verdadera!
Así que ni corta ni perezosa, cogí unas peras Rocha, y me metí en fogones. El perfume de los bizcochos cuando, ya horneados, están en proceso de enfriado es indescriptible. Hay que tomarlos tibios para percibir todos sus aromas.
Si no se consumen en el día, yo los he metido en el frigorífico, y al día siguiente estaban jugosísimos y deliciosos, eso sí, sin el perfume que desprendían cuando aún tenían calor. Totalmente recomendables.
Yo he horneado dos cakes en moldes desechables del súper. Uno de ellos se fue directamente a casa de mi hermana, porque las cosas buenas hay que compartirlas... ¿no creéis?
Como medida he usado un vasito de cristal de yogur.
Tiempo: 15 min + 60 min de horneado.
Ingredientes (para dos cakes):
-3 vasitos de harina de trigo.
-1 vasito de harina de maíz.
-2 vasitos de azúcar.
-2 vasitos de buttermilk.
-1 vasito de AOVE.
-3 huevos M.
-2 peras, yo he usado la variedad Rocha.
-1 cucharadita de café de bicarbonato.
-1 cucharadita de café de levadura química.
-1/2 cucharadita de café de canela en polvo.
-1/2 cucharadita de café de jengibre en polvo.
-1/2 cucharadita de café de vainilla en polvo.
-ralladura de nuez moscada.
-un pellizco de sal.
El horno lo encendemos a 175º para que vaya calentándose.
Primero mezclamos las especias, los huevos, el azúcar, el buttermilk y el AOVE en un bol.
Tamizamos en otro bol las harinas, la levadura, el bicarbonato y añadimos la pizca de sal.
Las peras las pelamos y descorazonamos y cortamos en trocitos.
Añadimos los ingredientes secos a la mezcla líquida y batimos con unas varillas hasta que estén perfectamente integrados. Vertemos en los moldes y ponemos una pera bien repartida sobre cada uno.
Horneamos durante una hora.
La cocción es orientativa. Si pasado este tiempo pinchamos con una brocheta y sale impregnada de masa, dejamos 10 minutos más. Y así hasta que salga limpia.
Sacamos, espolvoreamos ligeramente de azúcar en la superficie, dejamos entibiar y a disfrutar.
Con esta receta participo en el reto Color y Sabor de Temporada:
¡Gracias por estar aquí!
La receta es una pasada, un bizcocho que estoy segura que me encantaría.
ResponderEliminarUn beso Mabel y feliz domingo.
Si que te gustaría, estoy segura ;)
EliminarBesos Rosa!!!
Como me gustan esos bizcochos afrutados de textura húmeda!!! Te han quedado divinos.
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake
Gracias Sandra!!!
EliminarBesos!!!
se ve muy jugoso ese bizcocho, seguro que está delicioso. Un beso
ResponderEliminarA mí también me gustará y me lo llevo por si acaso cae. Con el buttermilk es verdad que estará más jugoso y es tan sencillo.
ResponderEliminarUn beset guapa.
Tiene una pinta espectacular, querria un cachito!!!!
ResponderEliminarSomos compis de reto asi que aqui me quedo.
Besos
hola guapa! dan ganas de llevárselo con esas esponjosidad y color tan suave, una delicia :)
ResponderEliminarSe ve deliciosoooo... mmmm!!!! La parte donde están las peras para mi novio y la de abajo que no lleva para mi... jejejeje!!! Que buenos los bizcochos! :D
ResponderEliminarBss!
Como dices tiene que se super suave porque hasta en las fotos se nota que la textura es perfecta, además especiado lo hace perfecto para empezar el día con un desayuno completo :)
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